Fotografía: EFE
La corte estatal de Nueva York rechazó una demanda presentada por el alcalde Eric Adams para detener el envío de autobuses con migrantes provenientes de Texas.
El caso giró en torno a una ley de 1817 que buscaba penalizar el transporte de indigentes para evitar que se convirtieran en una “carga pública”.
Sin embargo, la jueza Mary Rosado determinó que esta ley era inconstitucional, ya que violaba el derecho fundamental al libre tránsito dentro de los Estados Unidos y discriminaba a las personas según su estatus económico.
Desde 2022, más de 200,000 migrantes han recibido apoyo en Nueva York, incluyendo albergues y servicios básicos.
Aunque la demanda no prosperó, el alcalde Adams afirmó que la presentación legal ayudó a reducir significativamente la llegada de autobuses con migrantes desde mediados de 2023.
La ciudad ha implementado nuevas medidas, como limitar el tiempo de estancia en albergues para ciertos grupos, mientras continúa exigiendo al gobierno federal mayores recursos para afrontar esta crisis
Por su parte, el gobernador de Texas, Greg Abbott, defendió estas acciones como una respuesta a lo que considera fallos en las políticas migratorias del presidente Biden, redirigiendo los desafíos de la frontera hacia ciudades santuario como Nueva York.