El Gran Premio de Las Vegas, una de las citas más esperadas de la temporada de Fórmula 1, podría marcar la consagración definitiva de Max Verstappen como campeón del mundo por tercera vez consecutiva.
Con solo 86 puntos en juego, el neerlandés de Red Bull está a una mínima distancia de asegurar el título en una ciudad emblemática por su espectáculo y exceso.
Verstappen: más que un monoplaza dominante
A lo largo de la temporada, Verstappen no solo ha demostrado la potencia de su RB19, sino también su capacidad como piloto, destacando por maniobras brillantes como su remontada del 17º al 1º lugar en Brasil. A pesar de una racha de diez carreras sin ganar, su dominio ha sido incuestionable, reafirmándose como el máximo referente de la F1 actual.
Luchas paralelas en el Mundial
Aunque las tres primeras posiciones en la clasificación de pilotos están prácticamente definidas, las emociones se trasladan al Mundial de Constructores. McLaren lidera la tabla con 593 puntos, seguido de Ferrari (557) y Red Bull (544). El desempeño de pilotos clave como Carlos Sainz y Oscar Piastri será decisivo en las últimas tres carreras.
En contraste, el mexicano Sergio ‘Checo’ Pérez enfrenta un panorama complicado. Con resultados inconsistentes y bajo la presión de Helmut Marko, el futuro del piloto en Red Bull parece incierto, y este GP podría ser crucial para afianzar su posición.
El GP de Las Vegas: más que un evento deportivo
El regreso de la Fórmula 1 a Las Vegas no solo es relevante en lo deportivo, sino también en lo económico. La organización estima un impacto de 1,300 millones de euros, con paquetes VIP que alcanzan los 40,000 dólares. Además, se espera que el evento sea un espectáculo visual único, alineándose con la extravagancia característica de la ciudad.
Redacción deportes, 21 nov (EFE).-
