El área metropolitana de Nueva York y Nueva Jersey se enfrenta a un cambio drástico en las condiciones climáticas tras semanas de sequía y temperaturas moderadas.
El Servicio Meteorológico Nacional emitió una alerta roja para el jueves 21 de noviembre, debido a un sistema de tormentas que trae lluvias intensas, fuertes vientos y la posibilidad de nieve en algunas zonas.
Pronóstico meteorológico
El fenómeno comenzará en la madrugada del jueves con lluvias persistentes y ráfagas de viento de entre 40 y 56 km/h, aumentando el riesgo de inundaciones en carreteras y acumulaciones peligrosas de agua. En las elevaciones más altas, como Catskills y Poconos, se espera que la lluvia se convierta en nieve húmeda durante la noche.
En la ciudad, las temperaturas descenderán bruscamente, creando sensaciones térmicas de entre 1°C y 4°C para la tarde del jueves. El viernes amanecerá con condiciones resbaladizas en las carreteras debido a las bajas temperaturas y posibles acumulaciones de agua o nieve.
Impactos en el transporte
El transporte público podría experimentar retrasos e interrupciones. Las lluvias intensas complicarán la movilidad en autobuses y trenes de cercanías, mientras que la posible nieve afectará la seguridad vial en las primeras horas del viernes. Autoridades locales instan a los residentes a planificar con antelación sus desplazamientos y estar atentos a las actualizaciones meteorológicas.
Ayuda para la sequía
Este evento climático podría traer un alivio temporal a la sequía que afecta a la región, donde diez condados de Nueva York y gran parte de Nueva Jersey han registrado déficits en los niveles de agua. Las precipitaciones, que se estiman entre 19 y 76 mm, ayudarán a mitigar la situación, aunque el terreno seco podría generar escorrentías antes de absorber el agua eficientemente.
Precauciones recomendadas
- Revisar las alertas locales para cambios en el pronóstico y posibles cierres de carreteras.
- Evitar áreas inundadas y transitar con cuidado en superficies resbaladizas.
- Planificar tiempos adicionales para traslados, especialmente en horas pico.
- Vestir ropa adecuada para el clima frío y húmedo.
El cambio climático extremo que afecta a Nueva York y Nueva Jersey subraya la importancia de estar preparados ante eventos inesperados que pueden alterar las rutinas diarias de millones de personas en la región.