El Centro Europeo de Física de Partículas (CERN) está realizando estudios geológicos preliminares para la posible construcción del Futuro Colisionador Circular (FCC), un acelerador de partículas que triplicaría el tamaño del Gran Colisionador de Hadrones (LHC).
Este proyecto, que podría entrar en operación a partir de 2040, se situaría a entre 100 y 300 metros de profundidad en un trazado de 91 kilómetros bajo Ginebra (Suiza) y los departamentos franceses de Ain y Alta Saboya.
Desde septiembre, se han iniciado perforaciones en 30 puntos clave para evaluar la calidad del terreno, con mediciones ya en marcha en Allonzier-la-Caille, en Alta Saboya, y con planes para extenderlas al cantón de Ginebra en 2025.
Estas investigaciones buscan determinar la viabilidad técnica, económica y ambiental del FCC, que sería una de las infraestructuras científicas más ambiciosas del siglo XXI.
El FCC sustituiría al LHC, que desde 2008 ha permitido avances significativos en la física fundamental, como el descubrimiento del bosón de Higgs. El CERN proyecta que este nuevo megacolisionador abordará preguntas aún pendientes, explorando el 95 % de la masa y energía del universo que permanece desconocida.
Un primer informe sobre la viabilidad del FCC se espera para 2025, pero la decisión final sobre su construcción no se tomará antes de 2027, según informó el CERN. Este colisionador marcaría un hito en la investigación científica global, consolidando a Europa como líder en la exploración de los misterios del universo.