Freeman Coleman, nuevo director del Departamento de Seguridad Pública de Texas (DPS), asumió el cargo esta semana con un firme compromiso de reforzar la seguridad estatal. En una ceremonia junto al gobernador republicano Greg Abbott, Coleman enfatizó su intención de proteger a Texas contra “carteles, pandillas y criminales”.
Durante su discurso, Coleman destacó:
- Refuerzo en la frontera sur: Subrayó que garantizará la seguridad en la frontera con México.
- Ley y orden: Prometió no ceder territorio a los carteles y asegurar la colaboración de las fuerzas del orden con el gobierno estatal y federal.
El inicio de la gestión de Coleman coincide con los preparativos para la próxima administración de Donald Trump, reelegido como presidente. Trump ha anunciado una campaña masiva de deportaciones para los 11 millones de migrantes indocumentados en EE.UU., con el apoyo del gobernador Abbott y el DPS.
El ‘zar de la frontera’, Tom Homan, designado por Trump para supervisar estas acciones, visitó recientemente Eagle Pass y una base militar en el Río Grande, donde sostuvo reuniones con Abbott y líderes locales.
Según ambos, ya se están coordinando esfuerzos entre Texas y el equipo de transición presidencial para implementar el plan de deportaciones una vez que Trump asuma el cargo.
Las medidas anunciadas han generado críticas de organizaciones de derechos humanos y políticos en todo el país, quienes advierten sobre los impactos humanitarios y legales de estas iniciativas.