En una sala discreta de Bogotá, Colombia, se está llevando a cabo un proyecto pionero en Sudamérica: el Proyecto Cambie, una iniciativa de consumo supervisado de drogas que ofrece un espacio seguro y controlado para personas que utilizan sustancias inyectables.
Esta sala, operada por la organización Acción Técnica Social (ATS), busca reducir los riesgos asociados al consumo de drogas, como sobredosis y enfermedades contagiosas, proporcionando material limpio, asistencia médica y apoyo psicológico.
Desde su apertura en 2023, la sala ha sido utilizada más de 2,300 veces, evitando riesgos asociados al consumo en la vía pública y supervisando 14 sobredosis, todas tratadas exitosamente. Además, se han distribuido más de 40,000 jeringas esterilizadas y recolectado cerca de 15,000 para su correcta disposición, reduciendo peligros como infecciones accidentales.
El coordinador del proyecto, Daniel Rojas, enfatiza que el objetivo principal es salvar vidas y promover el bienestar de los usuarios en un entorno respetuoso y seguro.

Además de supervisar el consumo, Cambie ofrece servicios como comida, atención de enfermería y espacios para dormir, beneficiando especialmente a personas en situación de calle, que representan el 25% de los usuarios.
Entre sus colaboradores está Lorena, quien, además de ser usuaria, trabaja como “par” ayudando a otros a consumir de forma segura. Lorena también destaca la importancia del apoyo psicológico, ya que las historias personales de los usuarios suelen ser emocionalmente desafiantes.

Este modelo no solo reduce los riesgos individuales, sino que también minimiza la presencia de jeringas en espacios públicos y fomenta el acceso a información sobre sustancias psicoactivas. ATS también lidera proyectos como análisis de drogas y campañas de concienciación sobre el consumo responsable.