La Fiscalía General de Nueva York afirmó que no retirará el caso civil por fraude contra Donald Trump, a pesar de que este asumirá como presidente el próximo 20 de enero. El tribunal ya había multado al magnate con 450 millones de dólares a principios de año, tras determinar que infló el valor de su patrimonio.
Según la Fiscalía, los presidentes no gozan de inmunidad en litigios civiles ajenos a su función oficial, por lo que el proceso continuará. Asimismo, enfatizó que la toma de posesión de Trump no afecta a los otros catorce acusados en el caso, que incluye a sus empresas, sus hijos Donald Jr. y Eric, y un exejecutivo de la organización.
Los abogados de Trump solicitaron la anulación del caso, argumentando que sería lo mejor “por el bien del país”. Sin embargo, la Fiscalía indicó que espera la resolución de la apelación interpuesta por Trump y sus hijos, y aseguró que el proceso no interfiere con sus responsabilidades presidenciales.