Imagen vía Flickr
Tlalpujahua es un encantador Pueblo Mágico ubicado en Michoacán que combina historia, cultura y tradición. Su nombre es de origen náhuatl que significa “tierra de tezontle” o “tierra boja o esponjosa”; con su arquitectura virreinal de casonas con balcones y pasado minero Tlalpujahua es un destino destacable
Aunque eso no es lo único por lo que resalta, pues su título de “pueblo de la eterna Navidad” no solo se debe a su atmósfera festiva, sino a su famosa Feria de la Esfera, que celebra el talento de sus artesanos en la fabricación de adornos navideños únicos.


Imágenes vía Facebook Tlalpujahua y vía web Pueblos Mágicos
La Casa de Santa Claus, legado de vidrio soplado
La tradición comenzó en 1965, cuando Joaquín Muñoz Orta y María Elena Ruiz Villagrán regresaron de Estados Unidos con técnicas de fabricación de adornos navideños como el vidrio soplado, convirtiendo esta técnica en la base de una industria que hoy sustenta a más de 400 talleres artesanales y genera una derrama económica significativa, especialmente entre octubre y diciembre.
La Casa de Santa Claus, uno de los puntos más icónicos, permite a los visitantes disfrutar del trabajo de más de 500 artesanos, observar la magia de la creación de esferas y hasta saludar a Papá Noel.
Más allá de las esferas
Tlalpujahua no solo ofrece su impresionante legado artesanal, sino también un recorrido por su pasado minero y sus tesoros naturales:
- Mina Dos Estrellas: Testimonio de la época dorada de la minería.
- Presa Brockman: Ideal para paseos y actividades al aire libre.
- Parque Nacional Rayón: Un espacio lleno de naturaleza y tranquilidad.
- Iglesia hundida: Un místico vestigio sumergido en historia y belleza.