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El cambio de horario es un tema que atrae debate en si es algo positivo o negativo. Cada año, con el fin de aprovechar mejor la luz natural, se realiza un ajuste al reloj a nivel nacional.
Este año se acaba de confirmar la fecha exacta en la que se hará el ajuste al tiempo: Domingo 9 de marzo, 2:00 horas tiempo estándar local, los relojes deberán adelantarse una hora, marcando las 3:00 am. hora de verano.
Entre las ventajas del cambio de horario se encuentran el poder realizar más actividades al aire libre en las tardes y aprovechar la luz natural sin necesidad de utilizar la electricidad. Sin embargo también existen unas desventajas como el perder una hora de sueño el día exacto en que se hace el cambio de horario lo que puede ocasionar un desbalance en la rutina de sueño de algunos ciudadanos sumado a que las mañanas serán más oscuras.
¿Para quienes no aplica el ajuste de horario?
Aunque el cambio de horario se lleva a cabo en todo Estados Unidos, existen algunos lugares en los que, por sus características geográficas y climáticas prefieren mantener el horario estándar todo el año pues el cambio no les beneficiaría mucho. Hawái, gran parte de Arizona, Puerto Rico, Guam, las Islas Marianas del Norte, Samoa Americana y las Islas Vírgenes, no aplican el horario de verano, ya que la variación en la luz diurna a lo largo del año es mínima.
Un gran tema de debate
El horario de verano ha sido tema de debate durante años debido a su impacto en la vida cotidiana y su efectividad. En marzo de 2022, se presentó en el Senado el Sunshine Protection Act, una propuesta para hacer permanente este horario en todo el país, eliminando los cambios bianuales, los cuales algunos consideran innecesarios y perjudiciales para la salud. Sin embargo, la iniciativa aún enfrenta obstáculos legislativos y no ha sido aprobada.
Contrario a la creencia popular, el horario de verano no fue impulsado por agricultores que buscaban más luz para trabajar. Según Michael Downing, autor de Spring Forward: The Annual Madness of Daylight Saving Time, uno de los principales defensores de esta política fue la Cámara de Comercio, que vio en la luz adicional una oportunidad para que los trabajadores realizaran más compras al salir del trabajo.
