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Una intensa ola de calor mantiene en alerta este jueves a más de 130 millones de personas en Estados Unidos, informó el Servicio Meteorológico Nacional (NWS), mientras el Departamento de Energía declaró una emergencia por riesgos en el suministro eléctrico.
El NWS advirtió que la ola de calor, calificada como “extremadamente peligrosa”, persistirá al menos hasta el viernes, afectando desde el Medio Oeste hasta el Atlántico Medio. Las temperaturas han superado los 100 ºF (37 ºC), con récords en ciudades como Columbus, Filadelfia y Washington.
Ante la situación, el Departamento de Energía autorizó a la empresa Duke Energy Carolinas —con más de 7 millones de clientes— a operar sus unidades de generación eléctrica al máximo. La medida busca garantizar el abastecimiento en estados como Carolina del Norte, Carolina del Sur, Ohio, Indiana, Kentucky y Florida.
“El pueblo estadounidense no debería preocuparse por la capacidad de su red eléctrica durante olas de calor como esta”, afirmó el secretario de Energía, Chris Wright, al justificar la orden.
Ciudades como Boston, Filadelfia y el estado de Nueva York ya han declarado estados de emergencia por las altas temperaturas. En 2023, EE.UU. registró más de 2.300 muertes relacionadas con el calor, la cifra más alta en cuatro años, según el Journal of the American Medical Association.
EFE