Miami, 6 nov (EFE).- Grupos defensores de los inmigrantes resaltaron este miércoles el aporte de esta comunidad al desarrollo de Estados Unidos y ante el inminente retorno del expresidente Donald Trump (2017-2021) a la Casa Blanca enviaron un mensaje de unidad y resistencia.

Apenas horas después de confirmarse el triunfo del candidato republicano, diversas organizaciones proinmigrantes han alzado la voz en todo el país, condenando la amenaza de deportaciones masivas planteada por Donald Trump. En un ambiente de preocupación, los activistas han reafirmado su compromiso de defender a las familias inmigrantes y proteger los derechos civiles en Estados Unidos.
La Asociación Estadounidense de Abogados de Inmigración (AILA) fue de las primeras en pronunciarse, destacando la importancia de los inmigrantes para la economía y el desarrollo del país. Benjamin Johnson, director ejecutivo de AILA, señaló que las políticas restrictivas prometidas por Trump podrían causar un “daño duradero” a nivel económico y social. Con más de 16,000 miembros, AILA se ha comprometido a oponerse a cualquier medida que infrinja el debido proceso o denigre las contribuciones de la comunidad inmigrante.
La Alianza Américas, que agrupa a decenas de organizaciones latinoamericanas, emitió un mensaje de solidaridad, recordando que el bienestar de EE. UU. está directamente ligado al de las familias inmigrantes. Dulce Guzmán, directora de la alianza, reafirmó su intención de continuar luchando por políticas inclusivas y por el reconocimiento de las contribuciones de los inmigrantes en el país.
Por otro lado, la Asociación Estadounidense de Libertades Civiles (ACLU) prometió enfrentar legalmente cualquier intento de implementar un plan de deportación masiva desde el inicio de la nueva administración. Greisa Martínez Rosas, de United We Dream, y Angélica Salas, de la Coalición por los Derechos Humanos de los Inmigrantes (CHIRLA), coincidieron en la necesidad de proteger a las familias y evitar la separación de seres queridos, recordando que la mayoría de los estadounidenses apoya un camino hacia la ciudadanía.
En Nueva York, las organizaciones Se Hace Camino y la Coalición de Inmigración de Nueva York también se preparan para resistir cualquier iniciativa que amenace a las comunidades inmigrantes.
Aunque en su discurso de victoria, Trump mostró un tono más moderado, reafirmó su intención de “sellar” la frontera y expulsar a inmigrantes indocumentados, subrayando que solo quienes ingresen de manera legal serán bienvenidos.
Este llamado de alerta de los grupos proinmigrantes refleja un compromiso profundo con la justicia social y una postura de defensa ante posibles políticas que, según temen, podrían impactar negativamente el carácter inclusivo de la nación.