Foto: EFE
Miles de fanáticos de Bad Bunny abarrotaron este miércoles los puntos de venta en Puerto Rico para conseguir entradas a su histórica residencia artística en el Coliseo de San Juan. Bajo el título “No me quiero ir de aquí”, el cantante ofrecerá 21 funciones a partir del 11 de julio, marcando un récord en la principal sala de espectáculos de la isla al superar las 14 presentaciones del dúo Wisin y Yandel.
Una experiencia única para los fans
En el Mercado de Río Piedras, en San Juan, las filas comenzaron desde la madrugada. Luca Meléndez, un joven de 20 años que llegó a la 1:40 a. m., relató cómo las calles ya estaban llenas de personas disfrutando del ambiente festivo con música, parrandas y puestos de comida. La lluvia no detuvo a los asistentes, muchos de los cuales pasaron horas en el pavimento, manteniéndose firmes en su deseo de asegurar su lugar en el evento.
Ventas exclusivas y conexión con la isla
Las primeras nueve funciones serán exclusivamente para residentes de Puerto Rico. Con una mecánica de venta diseñada por Bad Bunny y los productores Noah Assad Presents y Move Concerts, los asistentes recibieron tarjetas con códigos QR y promocodes en nueve puntos de la isla, como Mayagüez, Humacao, Ponce y Arecibo, lo que garantizó un proceso organizado y transparente.
Impacto turístico y musical
Las presentaciones a partir del 1 de agosto estarán abiertas a fanáticos internacionales, lo que convertirá los conciertos en un fenómeno turístico que impulsará la economía local. Además, el álbum “Debí tirar más fotos”, homenaje a Puerto Rico con fusiones de reguetón, salsa y plena, promete hacer vibrar a los asistentes.
El fenómeno Bad Bunny continúa haciendo historia, no solo en la música, sino también en la conexión con sus raíces y su gente.
EFE