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Barranquilla se ha convertido en el epicentro mundial del fenómeno Shakira. Con motivo de sus conciertos del 20 y 21 de febrero en el Estadio Metropolitano Roberto Meléndez, la ciudad colombiana ha recibido a su estrella más grande con un homenaje sin precedentes: el ‘Shakiverso’, una experiencia inmersiva al aire libre que repasa la carrera de ‘La Loba’.
El Malecón del Río es el escenario de esta celebración, donde fanáticos de todas las edades pueden revivir los momentos más icónicos de la artista. Desde sus primeros éxitos en 1991 hasta su consolidación como una de las mayores estrellas del pop mundial, el recorrido emociona a quienes han seguido su trayectoria.
Para Andrea Martínez, de 21 años, la espera valió la pena. “Somos un combo de tres hermanos, dos primos, mi novio y otros cuatro amigos. Nos costó conseguir todas las entradas, pero lo logramos”, cuenta emocionada mientras se toma fotos junto a la imagen de su ídola.
Pero el ‘Shakiverso’ no solo es nostalgia. También ha despertado historias de amor como la de Pedro y Paola, quienes se conocieron en 1998 en un show de Shakira y Joe Arroyo. “Pedro me pidió bailar, pero no le hice caso. Años después nos reencontramos y en 2010 nos casamos”, recuerda Paola entre risas.
El impacto económico es enorme: se espera una derrama de 16,2 millones de dólares, con hoteles al 90 % de ocupación y ventas en aumento. Incluso vendedores ambulantes, aprovechan la fiebre de Shakira para comercializar artículos con su imagen.
Barranquilla está lista para bailar al ritmo de ‘Loba’, ‘La bicicleta’ y ‘Waka Waka’ en un evento que quedará en la historia.
EFE