Redacción deportes, 8 oct (EFE).- Cabo Verde no pudo hacer historia y deberá esperar a la última jornada, en la que los ‘tiburones azules’ se medirán el próximo lunes en casa con Esuatini, para tratar de sellar el billete para el Mundial de 2026, tras ser incapaz de pasar este miércoles del empate (3-3) en su visita a Libia.
Un resultado insuficiente para que los de Pedro Leitao ‘Bubista’, que llegaban a Tripoli tras haber vencido los últimos cinco encuentros de la fase de clasificación, sumasen los tres puntos para certificar su primera presencia en la fase final de una Copa del Mundo.
Este objetivo no tardó en complicarse para el conjunto caboverdiano que al minuto de juego ya marchaba por detrás en el marcador (0-1) con un gol en propia meta del central Roberto Lopes.
Todo un mazazo del que Cabo Verde logró reponerse tras lograr igualar la contienda (1-1) a los treinta minutos con un cabezazo del futbolista del Vitoria de Guimaraes portugués Telmo Arcanjo.
Pero ni así acabaron los problemas de los ‘tiburones azules’ que parecieron despedirse de cualquier opción de lograr este miércoles el billete mundialista, tras situarse a los 58 minutos de juego con una desventaja de dos tantos (3-1) en el marcador.
Un sorprendente resultado que pareció hacer reaccionar a los de Bubista que volvieron a dar vida al sueño mundialista, tras igualar de nuevo el encuentro con los goles de Sidny Cabral y Willy Semedo, que firmó el 3-3 a falta de ocho minutos para la conclusión.
Tantos que parecieron dar alas a los jugadores caboverdianos, que desaprovecharon dos inmejorables ocasiones en el tiempo de prolongación para lograr la victoria y sellar el billete para el Mundial de Estados Unidos, México y Canadá.
Un pasaporte que los ‘tiburones azules’ tratarán de lograr el próximo lunes ante su afición en el encuentro que les medirá con Esuatini, que hasta ahora no ha sido capaz de ganar ni uno solo de los nueve encuentros -3 empates y 6 derrotas- de la fase de clasificación. EFE