El gobernador de California, Gavin Newsom, aseguró que el estado tomará medidas para reactivar sus programas de subsidios a vehículos eléctricos si el presidente electo de EE.UU., Donald Trump, elimina los incentivos fiscales federales actuales.
Trump ha manifestado su intención de eliminar el crédito fiscal de $7,500 dólares, que beneficia a los compradores de vehículos eléctricos, una medida que se enmarca dentro de su postura contra las políticas de cambio climático.
California, un líder en la adopción de vehículos eléctricos, con un mercado que representa un tercio de las ventas nacionales, ha reafirmado su compromiso con el medio ambiente y la creación de empleos verdes. Newsom afirmó que el estado no retrocederá en sus esfuerzos por reducir la contaminación y que, en caso de que Trump elimine el crédito fiscal, California actuará para mantener el impulso hacia el transporte limpio.
El estado ha sido un pionero en la promoción de vehículos eléctricos, con más de dos millones de unidades vendidas, entre completamente eléctricos e híbridos enchufables. La postura de Newsom refleja una clara resistencia a la agenda ambiental de Trump, quien ha minimizado las preocupaciones sobre el cambio climático y favorecido el desarrollo de la industria petrolera y gasífera.
El poder económico y comercial de California ha sido fundamental para influir en las decisiones de los fabricantes de automóviles, quienes, en su mayoría, han adoptado voluntariamente normas más estrictas sobre emisiones debido a las regulaciones del estado. Esta capacidad para establecer estándares en el sector automotriz es uno de los puntos de conflicto entre Newsom y Trump.