Tokio, 28 feb (EFE).- El incendio forestal de la ciudad de Ofunato, en el noreste nipón, siguió propagándose este viernes, dos días después de ser declarado, durante los que ha quemado unas 1.200 hectáreas de terreno, destruido 84 hogares y causado un muerto.
Las autoridades esperan que estas cifras aumenten, dado que está resultando difícil confirmar la magnitud de los daños mientras se siguen priorizando las labores de control y extinción de las llamas, en las que están participando cerca de 2.500 efectivos de bomberos, entre ellos más de 1.600 desplazados desde fuera de la prefectura afectada, según datos publicados por la cadena pública NHK.
El incendio se declaró sobre las 13:00 hora local del miércoles (4:00 GMT) y se cree que comenzó en un cobertizo de trabajo y desde allí se propagó a una zona boscosa, donde las condiciones meteorológicas de aire seco han favorecido su propagación.
Un total de 16 helicópteros, entre ellos siete de las Fuerzas de Autodefensa (Ejército), participaban hoy desde el aire rociando agua y verificando el estado del incendio, de acuerdo al citado medio, que despliega ocasionalmente su propio aparato con cámaras en directo.
Al menos una persona ha muerto y las autoridades mantienen una orden de evacuación que afecta a unos 3.300 vecinos de las zonas afectadas, en las que han resultado dañadas 84 viviendas y otros edificios, que se haya podido confirmar hasta el momento.
Las costas del sur de la prefectura de Iwate, donde se ubica la urbe, están en alerta por tiempo seco desde el pasado 18 de febrero y desde entonces se habían declarado otros incendios forestales en la propia Ofunato y en Rikuzentakata, que ya fueron contenidos.
El observatorio meteorológico local no prevé precipitaciones significativas en la zona en los próximos días y esperan que el aviso por tiempo seco se mantenga vigente por el momento.
Ofunato fue uno de los terrenos devastados por el tsunami que siguió al fuerte terremoto del 11 de marzo de 2011 del noreste japonés, en el que más de 500 personas de este municipio murieron o desaparecieron y cuantiosas casas resultaron destruidas.