Foto: Cultura Tabasco vía Facebook
México es un país que respira cultura a través de sus danzas, colores y melodías. Cada rincón guarda tradiciones que, más allá del espectáculo, cuentan historias profundas, como el “Baila Viejo” (Ak ot tuba noxib), un ritual que late en el corazón de la etnia chontal en Tabasco.
El “Baila Viejo” no es solo una danza, es un puente entre generaciones. Representa la conexión con el “Gran Viejo”, un ser mítico que, según los relatos, enseñó a los chontales el arte de la siembra y el uso de herramientas agrícolas. Este conocimiento se celebra y agradece con una danza que es al mismo tiempo ofrenda, tradición y memoria.
En comunidades como Tucta, Guaytalpa y Tecoluta, el “Baila Viejo” toma vida durante las fiestas patronales. Es un espectáculo que comienza a las ocho de la noche y no se detiene hasta el amanecer, mientras los danzantes, acompañados por el sonido del tambor y la flauta de carrizo, llevan el ritmo de sones que parecen susurrar secretos del pasado.

Foto: Cultura Tabasco vía Facebook
Los Danzantes: Portadores del tiempo
La danza es un acto exclusivamente masculino. Los intérpretes, descalzos, portan máscaras talladas en madera de cedro con rasgos envejecidos y pelucas de jolotzin, que imitan el cabello canoso. Cada detalle de su atuendo tiene un propósito: el abanico de palma en la mano derecha refresca al danzante, mientras la sonaja de jícara en la izquierda marca el compás de la música. Estos hombres cargan la responsabilidad de mantener viva la tradición, enseñándola a las nuevas generaciones para que nunca se pierda.

Foto: Sitio web Tabasco Hoy
Más que una danza, una historia
El colorido ritual “Baila Viejo”, es un testimonio de la riqueza cultural de Tabasco. Es el eco de un México donde lo ancestral y lo cotidiano se entrelazan, donde la música y el baile no son solo entretenimiento, sino una forma de rendir tributo a la tierra, a los dioses y a quienes estuvieron antes.
Cuando el sol comienza a iluminar el horizonte y el tambor finalmente calla, el “Baila Viejo” deja en el aire la sensación de un México profundo, vibrante, que nunca olvida de dónde viene.
En cada paso, en cada máscara, en cada nota que vibra en el aire, el “Baila Viejo” nos recuerda que las tradiciones mexicanas son más que cultura: son identidad, resistencia y, sobre todo, motivo de orgullo y alegría.

Foto: Sitio web Tabasco Hoy