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Elon Musk, dueño de SpaceX, restó importancia a la explosión de un cohete durante una prueba en tierra la noche del miércoles. “Solo un rasguño”, escribió en su red social X.
La explosión ocurrió alrededor de las 23:00 horas en la base ‘StarBase’ de SpaceX en Texas, durante una prueba de ignición del cohete Starship. El momento fue transmitido en directo por canales especializados como NSF-NasaSpaceflight.com, aunque este no pertenece a la NASA.
SpaceX confirmó en X que la nave sufrió una “grave anomalía” mientras se encontraba en el banco de pruebas, pero aclaró que no hubo heridos, ya que se mantenía una zona de seguridad alrededor del sitio.
La empresa aseguró que trabaja activamente para asegurar el área en coordinación con autoridades locales, y pidió a la población no acercarse mientras continúan las labores de control.
Este incidente se suma a otros fallos previos del Starship, incluido el del pasado 27 de mayo, cuando la nave alcanzó la órbita pero cayó al océano por pérdida de combustible. A pesar de los contratiempos, SpaceX continúa su ambicioso plan de utilizar este cohete para llegar a Marte.
EFE
