Zagreb, 23 nov (EFE).- Los eslovenos han comenzado este domingo a las 06.00 GMT a votar en referendo vinculante si entra en vigor o se anula la ley de suicidio asistido aprobada por el Parlamento el pasado julio pero cuya aplicación quedó en suspenso tras una campaña de fuerzas conservadoras y de la Iglesia católica.
La consulta, convocada por el Parlamento el 17 de octubre, se produce después de que una campaña conservadora presentara más de 46.000 firmas, por encima de las 40.000 necesarias.
La ley quedará derogada si se opone a ella una mayoría de los votantes, pero sólo si la participación supera el 20 %.
La norma aprobada en julio, la primera de este tipo en un país de Europa del Este, establece que sólo los adultos mentalmente capacitados y afectados por un sufrimiento insoportable por una enfermedad terminal o muy grave, y sin visos de mejora, podrán solicitar la asistencia para morir.
En caso de ser aprobada su solicitud y pasados diversos controles médicos y psicológicos, el paciente debe ingerir o inyectarse por sí mismo la sustancia legal para acabar con su vida, y el personal sanitario -desde enfermeros y médicos hasta farmacéuticos- podrá optar por no participar.
El pasado junio se celebró un referéndum consultivo en el que el 55 % de los votantes apoyó regular el suicidio asistido. Posteriormente, el Parlamento aprobó en julio la ley con 50 votos a favor, 34 en contra y tres abstenciones.
El Consejo Nacional, la cámara alta, que funciona como un órgano de control, aplicó un veto suspensivo tras el que se comenzó a recoger firmas para convocar el referendo consultivo.
Las encuestas prevén que los ciudadanos apoyen mantener la ley.
Entre quienes la defienden está el primer ministro, el liberal Robert Golob, que al votar de forma anticipada recordó la “agonía insoportable” de su padre por un cáncer de páncreas, y pidió apoyar la norma para evitar que otros pasen por una situación similar.
La oposición a la ley, encabezada por sectores conservadores, la Iglesia católica y el Partido Democrático Esloveno (SDS), sostiene que el texto vulnera la protección de la vida recogida en la Constitución.
Las primeras estimaciones de voto se conocerán tras el cierre de los colegios a las 18.00 GMT mientras que los resultados oficiales se sabrán varios días después.