Imagen vía X Peter Hegseth
Ante las críticas internacionales por los ataques contra supuestas narcolanchas en el Caribe y el Pacífico, este miércoles el secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, afirmó que su país tiene todo el derecho para realizar dichas operaciones militares en su hemisferio.
De igual manera, un portavoz del Departamento de Justicia aseguró la legalidad de los ataques estadounidenses en el Caribe contra presuntas narcolanchas y agregó que los responsables militares no pueden ser perseguidos judicialmente por ello pues fueron ordenados de acuerdo con las leyes de conflicto armado.
El portavoz añadió que los militares encargados de ejecutar las órdenes de ataque, que han dejado al menos 76 personas muertas, no corren riesgo de ser procesados.
El pasado lunes, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Turk, instó a Washington investigar la legalidad de los ataques, señalando que existen “fuertes indicios” de ejecuciones extrajudiciales. Según Turk, los ataques deberían considerarse “operaciones de aplicación de la ley”, donde el uso de la fuerza letal “debe ser el último recurso”.
El Washington Post reveló que el Departamento de Justicia elaboró en julio un informe clasificado que justifica legalmente las operaciones y protege a los militares de posibles enjuiciamientos.
La administración Trump, por su parte, notificó al Congreso que Estados Unidos mantiene un “conflicto armado” con los cárteles de drogas latinoamericanos, considerados por Washington como “grupos terroristas”, argumento con el que busca legitimar las acciones militares.
El presidente venezolano Nicolás Maduro calificó el incremento militar estadounidense como parte de un complot para derrocarlo, mientras la comunidad internacional sigue exigiendo transparencia sobre las muertes registradas en los ataques.