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Grupos de rescate continúan trabajando tras las catastróficas inundaciones que han dejado al menos 100 personas muertas, entre ellas 27 niñas y sus guías de un campamento cristiano arrasado por el desbordamiento del río Guadalupe en el condado de Kerr.
La tragedia, ocurrida durante el fin de semana del 4 de julio, ha sido descrita por el presidente Donald Trump como una “catástrofe no vista en 100 años”. El mandatario firmó una declaración de desastre grave que libera recursos federales para las tareas de búsqueda, rescate y reconstrucción en la región.
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Camp Mystic: el dolor de una comunidad entera
El Camp Mystic, donde se encontraban alojadas unas 750 personas, fue arrasado durante la madrugada del viernes cuando las aguas alcanzaron los techos de las cabañas mientras las niñas dormían.
“Camp Mystic está de luto por la pérdida de 27 campistas y guías”, señaló la organización en un comunicado. “Estamos destrozados junto con nuestras familias”.
La escena dejó imágenes dolorosas: ositos de peluche, mantas y pertenencias personales cubiertas de lodo, y estructuras totalmente colapsadas por la fuerza del agua.
El sheriff Larry Leitha confirmó que 75 de las víctimas fueron encontradas en el condado de Kerr, incluyendo 48 adultos y 27 menores. Helicópteros, botes y voluntarios trabajan intensamente para localizar a los desaparecidos. El total de fallecidos en el estado asciende a 91 hasta el momento.
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Reacciones oficiales
El senador Ted Cruz calificó lo ocurrido como “la pesadilla de cualquier padre”. Por su parte, la Casa Blanca defendió la actuación del Servicio Meteorológico Nacional (NWS), negando que los recortes presupuestales hayan afectado los sistemas de alerta. Por su parte el presidente Trump enfatizó que “culpar al presidente por las inundaciones es una mentira depravada” y prometió visitar Texas este viernes.
El NWS mantiene activa la alerta por inundaciones repentinas, particularmente en el centro de Texas, una zona apodada el “callejón de las inundaciones” debido a su geografía propensa a desastres de este tipo.
Las autoridades han comenzado también con el proceso de remoción de escombros. El gobernador Greg Abbott informó que muchas carreteras permanecen bloqueadas, lo que complica las labores de reconstrucción.
