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Un juez federal de New Hampshire bloqueó este jueves la orden ejecutiva del presidente estadounidense, Donald Trump, de limitar la ciudadanía por nacimiento con carácter nacional.
El juez federal Joseph Laplante, dictó en su lectura del fallo que privar de la ciudadanía estadounidense es un cambio abrupto en la política que provocaría daños irreparables; sin embargo, declaró una pausa de siete días en su decisión para permitir al Gobierno apelar su fallo, según recoge el caso tramitado como una demanda colectiva por la Unión de Libertades Civiles (ACLU).
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El magistrado, resaltó que la ciudadanía estadounidense “es el mayor privilegio que existe en el mundo”.
Previo a este fallo, la orden ejecutiva entraría en vigor el 27 de julio, después de que el Tribunal Supremo invalidara otros bloqueos similares emitidos por jueces estatales bajo el argumento de que no se podían bloquear decretos de alcance federal. Un fallo con enorme trascendencia jurídica ante la “barrera” de decisiones judiciales que se han opuesto a las políticas de Trump.
Reacciones entre los miembros del gobierno
Para Tom Homan, el “zar de la frontera” de Trump, el juez Laplante es un ejemplo más de “juez radical que no presta atención a la decisión del Supremo” por detener la agenda del presidente.
“Lo que necesitan entender es que el pueblo estadounidense apoya esta agenda. (…) A pesar del odio, la retórica, las amenazas, no vamos a parar. Seguiremos haciendo lo que estamos haciendo”, dijo a la prensa en la Casa Blanca.
En febrero, Laplante ya se había opuesto en otro fallo a la misma orden ejecutiva, pero limitando el alcance de su resolución solo a los miembros de varias organizaciones y no con carácter universal. Alegó entonces que la orden de Trump violaba la 14 enmienda constitucional.
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Según la primera interpretación, el fallo de ese juez se refiere a “los niños existentes y los futuros” que se verían afectados por la orden ejecutiva, pero no menciona a sus padres, como habían solicitado los demandantes.
La demanda recuerda que la nacionalidad por nacimiento es un “tesoro” garantizado por la enmienda 14 de la Constitución y por una larga jurisprudencia.
