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El desierto de la Zona del Silencio no deja de maravillar a cualquiera que haya escuchado sobre uno de los fenómenos naturales más enigmáticos de la zona norte de México, pero al silencio que reina en el desierto se le une otro fenómeno enigmático: los nopales morados de Mapimí.
En esta zona se pueden encontrar una gran variedad de especies endémicas de la región como la tortuga del desierto y vegetación tan rara como los nopales violetas.
Este tipo de nopal que solo crece en la Zona del Silencio alcanza una altura de 60 a 90 centímetros y su coloración violeta se da en tiempos de sequía y está adornada de espinas blancas que surgen de la pala; en sus puntas las flores que brotan son amarillas con el centro rojo.


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Su adaptación a las condiciones extremas de la región no solo los hace únicos, sino que también refleja la riqueza biológica de un área que aún guarda muchos secretos por descubrir.
Zona del silencio, un misterio moderno
La Zona del Silencio es una región que abarca áreas de los estados de Durango, Chihuahua, Coahuila; pero la zona que ha despertado interés internacional es la que se ubica en la zona del Bolsón de Mapimí, aproximadamente a 180 km de Torreón
Descubierta por científicos de la NASA en los 70´s cuando el cohete Athena perdió el control y cayó en la región que fue mandado a recuperar de inmediato con la ayuda de algunos pobladores para poder extraer el cohete. Lo que se supone sería una tarea sencilla, se convirtió en un trabajo de semanas
La Zona del Silencio debe su nombre a los reportes de interferencias en las señales de radio, que han alimentado teorías sobre campos magnéticos, actividad extraterrestre y fenómenos inexplicables. Su origen marino explica la abundancia de fósiles que alguna vez atrajeron tanto a investigadores como a saqueadores.