La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, reiteró este miércoles el compromiso de su gobierno con una política migratoria que no implique el cierre de fronteras, sino que promueva el respeto a los derechos humanos y la cooperación internacional.
En su mensaje a través de la plataforma X, Sheinbaum subrayó que el gobierno mexicano continuará implementando una estrategia integral para atender a las personas migrantes desde su ingreso al país, sin tomar medidas de cierre en su frontera sur.
Esta declaración surge luego de las polémicas declaraciones del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, quien aseguró que México se había comprometido a detener el flujo migratorio hacia su país “con efecto inmediato”.
Sin embargo, el gobierno mexicano desmintió este compromiso y reafirmó su postura de colaboración, buscando fortalecer la cooperación bilateral en la lucha contra el narcotráfico y otros temas de seguridad, respetando siempre la soberanía nacional.
La conversación entre Sheinbaum y Trump también ocurrió en un contexto de tensiones comerciales, luego de que el presidente electo anunciara su intención de imponer un arancel del 25% a productos provenientes de México y Canadá, lo que ha generado reacciones tanto en estos países como en el ámbito empresarial.
Ante estas amenazas, el gobierno mexicano ha comenzado negociaciones para proteger el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) y evitar medidas arancelarias que afecten el comercio regional.