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La ex primera dama de Estados Unidos, Michelle Obama, no estará presente en la toma de posesión de Donald Trump como el 47º presidente del país, según confirmaron fuentes de su oficina al portal CBS este martes. El evento está programado para el mediodía del próximo 20 de enero en el Capitolio.
Barack Obama, quien fue presidente entre 2009 y 2017, asistirá al evento sin la compañía de su esposa, marcando la segunda vez en menos de un mes que aparece solo en un acto público. La última ocasión fue durante el funeral de Estado del expresidente Jimmy Carter, donde Michelle Obama también estuvo ausente, aparentemente por encontrarse en Hawái.
Rivalidad marcada durante la campaña electoral
La ausencia de Michelle Obama podría interpretarse como un reflejo de la marcada rivalidad política entre los Obama y Donald Trump. Durante la reciente campaña presidencial, Michelle fue una firme crítica del republicano, describiéndolo como un “riesgo” para el país, especialmente para las mujeres. Por su parte, Trump respondió con descalificaciones, calificándola de “asquerosa” en sus discursos.
En las elecciones del 5 de noviembre, tanto Michelle como Barack Obama respaldaron a la candidata demócrata, Kamala Harris, quien compitió directamente contra Trump y perdió en un reñido proceso electoral.
Un contexto tenso para la ceremonia
La investidura de Trump estará marcada por divisiones políticas, con algunas figuras clave del Partido Demócrata optando por no asistir. A pesar de estas ausencias, se espera la presencia de otros expresidentes como Bill Clinton y George W. Bush, acompañados por sus respectivas esposas.
Este evento no solo simboliza el inicio del segundo mandato de Trump, sino que también resalta las tensiones políticas que continúan dominando el panorama estadounidense.
EFE
