Naciones Unidas, 9 sep (EFE).- La nueva presidenta de la Asamblea General de la ONU, Annalena Baerbock, insistió este martes en la necesidad de que el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abás, esté presente en la Semana de Alto Nivel que comienza el día 22 de septiembre, y en la que la cuestión palestina promete dominar todos los debates.
Baerbock, quien recién asumió su cargo, se refería así al veto impuesto por Estados Unidos -que ha denegado los visados para la delegación palestina- y la posibilidad de que Abás intervenga por videoconferencia para sortear ese veto.
“Según los acuerdos, el país anfitrión debe garantizar el acceso a todas las delegaciones, tal ha sido la práctica corriente en las pasadas ocho décadas de participación en la Asamblea General de la ONU al más alto nivel”, dijo Baerbock.
“Este (la Asamblea) es un lugar donde las naciones de todo el mundo pueden venir y trabajar colectivamente, y enfocarse en los problemas más candentes” del mundo, remachó.
Pese a sus palabras, y a las del secretario general en el mismo sentido, Estados Unidos no ha dado muestras de cambiar de opinión y mantiene su veto a Abás.
El veto a Abás y a toda la delegación palestina supone un contratiempo adicional al desarrollo de la Asamblea, porque Abás iba a ser uno de los principales participantes en la Conferencia para la solución de los dos Estados, que se prevé para el 22 de septiembre y en la que se espera que importantes países como Francia, Reino Unido, Canadá o Australia oficialicen su reconocimiento del Estado palestino.
Sin la presencia de Abás o de otros palestinos de alto nivel, esta conferencia organizada por Francia y Arabia Saudí pende ahora de un hilo y no está claro que pueda celebrarse.