Imagen vía web Gobierno de México
El Parque Nacional Cañón del Sumidero es uno de los destinos más emblemáticos de México, ubicado a pocos kilómetros de la capital de Chiapas, Tuxtla Gutiérrez. Con una extensión de 21,789 hectáreas, este parque se encuentra en cinco municipios de la región y se caracteriza por sus impresionantes paisajes naturales, convirtiéndolo en un lugar ideal para los amantes de la naturaleza y las actividades al aire libre.
Origen geológico y paisajes impresionantes
El Cañón del Sumidero tiene un origen geológico fascinante que se remonta a millones de años de procesos tectónicos y fallas geológicas. Las paredes del cañón, que superan los 1,000 metros de altura, se elevan majestuosamente sobre el cauce del río Grijalva, creando uno de los paisajes más impresionantes de México. Este fenómeno natural ha sido nominado como una de las Siete Nuevas Maravillas Naturales por su belleza y singularidad.


Imágenes vía web CONACACO y Gobierno de México
Biodiversidad excepcional
El valor ecológico del Cañón del Sumidero es innegable. Gracias a su geografía y microclimas, alberga una impresionante variedad de flora y fauna, muchas de las cuales son especies endémicas de la región. Algunas de las especies más destacadas incluyen:
- Salamandra Lengua Hongueada
- Cuija Mexicana
- Chupaflor Canelo
- Sapo Jaspeado
- Mojarra de Chiapa de Corzo
- Encino Enano
El parque es hogar de estas especies gracias a la diversidad de microclimas generados por la luz, el calor y los escurrimientos en las paredes del cañón. En 2004, debido a su importancia ecológica, fue clasificado como sitio Ramsar (humedal de importancia internacional).
Un refugio de riqueza natural
El Cañón del Sumidero, decretado como Parque Nacional en 1980, es un refugio natural que conserva la biodiversidad de la región y ofrece a los visitantes una experiencia inolvidable. Desde sus imponentes acantilados hasta las especies que habitan en sus márgenes, este parque continúa siendo un símbolo de la naturaleza mexicana.