Foto: EFE
Starbucks anunció este jueves que cerrará unas 400 tiendas en Norteamérica y despedirá a aproximadamente 900 empleados como parte de un plan de reestructuración de 1.000 millones de dólares.
El director ejecutivo, Brian Niccol, explicó que las tiendas que cerrarán son aquellas que “no logran crear el entorno físico que nuestros clientes y socios esperan” o donde no se visualiza un desempeño financiero sólido. La compañía cuenta actualmente con 18.734 locales en la región y terminará septiembre con 18.300, reflejando la reducción anunciada.
Los cierres se producirán la próxima semana, mientras que Starbucks planea remodelar más de 1.000 locales con sillas más cómodas, más enchufes y colores cálidos, buscando ofrecer una experiencia más atractiva a los clientes.
El 90 % de la inversión de reestructuración se destinará a Norteamérica, con el objetivo de revertir la caída en ventas en su mercado más grande. A los 900 despidos anunciados se suman los 1.100 del pasado febrero, marcando el mayor recorte de personal en la historia de la cadena.
Niccol aseguró que las decisiones no se tomaron a la ligera y que estos pasos buscan construir “un Starbucks más fuerte, resiliente y con mayor impacto en sus socios, proveedores y comunidades”.
EFE