La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, aseguró este lunes que no se requiere un incremento significativo en el presupuesto para hacer frente a las deportaciones masivas y las políticas migratorias restrictivas que implementará Donald Trump al asumir como presidente de Estados Unidos en enero.
Durante su conferencia matutina, Sheinbaum destacó que las instituciones clave, como el Instituto Nacional de Migración (INM) y la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), cuentan con recursos suficientes para atender estas demandas. “No es tanto el presupuesto, sino una reorganización interna. Estamos fortaleciendo al Instituto, que cumple varias funciones desde su creación”, explicó.

Trump ha prometido deportaciones masivas que podrían afectar a los aproximadamente 5.5 millones de mexicanos indocumentados en Estados Unidos, cuyas remesas representan cerca del 4 % del PIB de México. Este año, dichas remesas alcanzarían un récord de 65.000 millones de dólares, subrayando la importancia económica de los migrantes para el país.
Sheinbaum adelantó que encabezará este martes en Acapulco el Consejo Nacional de Seguridad, donde se reunirán los gobernadores del país para diseñar un plan migratorio. A pesar de estas iniciativas, rechazó realizar ajustes en el presupuesto de 2025, que debe ser aprobado esta semana en la Cámara de Diputados.

“El presupuesto se distribuye entre migración, albergues bajo la Secretaría de Bienestar y la Guardia Nacional, que realiza operativos humanitarios y rescates de migrantes”, detalló.
Aunque las detenciones diarias en la frontera con Estados Unidos han caído un 75 % desde diciembre de 2023, la migración irregular en territorio mexicano aumentó un 193 % interanual durante la primera mitad del año, superando las 712.000 personas, según la Unidad de Política Migratoria.