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Este miércoles se reportó un tiroteo en la base militar de Fort Stewart, en el estado de Georgia, que dejó un saldo de cinco soldados heridos. Según reportaron a medios, el sospechoso detenido es un sargento activo.
Los equipos de rescate atendieron a las víctimas en el lugar a las 11:09 horas (15:09 GMT) y posteriormente las trasladaron al hospital Winn Army Community, mientras que el sospechoso fue arrestado a las 11:35 horas (15:35 GMT), de acuerdo con el reporte oficial del Fort Stewart Hunter Army Airfield.
“El incidente permanece bajo investigación y no se revelará información adicional hasta que la investigación se complete”, indicó la base en un comunicado.
Despliegue de seguridad y cierre de la base
El operativo inició a las 10:56 horas (14:56 GMT) tras reportarse la presencia de un posible tirador en el Equipo de Combate de la Segunda Brigada Blindada. La base cerró a las 11:04 horas (15:04 GMT) como medida preventiva.
La Casa Blanca confirmó que el presidente Donald Trump fue informado del tiroteo y que el gobierno “monitorea la situación”.
El incidente, del que todavía no hay detalles ni identidad del presunto responsable, movilizó al FBI, a la policía y a la Agencia de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (AFT, en inglés), mientras que la División de Investigación Criminal del Ejército coordina la indagatoria.
Impacto y medidas de seguridad
Videos compartidos en redes sociales muestran a militares refugiándose durante los primeros disparos. Por otra parte, escuelas cercanas activaron protocolos de confinamiento para proteger a los estudiantes.
A diferencia de otros tiroteos masivos, este caso recibirá una investigación especial por ocurrir en una base militar, la más grande de las Fuerzas Armadas de Estados Unidos al este del Misisipi y sede de la Tercera División de Infantería.
En lo que va de 2025, Estados Unidos ha registrado 261 tiroteos masivos, en los que cuatro personas reciben disparos sin contar al atacante, según la organización civil Gun Violence Archive.
EFE